Qué está pasando con la formación de actores y directores para cine y audiovisuales.

En Colombia como en muchos otros países, nadie enseña a trabajar en cine; se aprende haciéndolo y eso en nuestro país y en Latinoamérica en general, es muy difícil de conseguir. En las escuelas de teatro algunas camufladas con el nombre en su oferta de "escuelas de cine" una mera quimera semántica publicitaria para ganar más víctimas, te enseñan pautas de interpretación, pero la verdad es que cuando tienes la suerte de trabajar en el audiovisual ante la cámara te tienes que olvidar de casi todo lo que te contaron por ineficaz al ser lenguajes diferentes. Esto que estoy comentando sin ninguna acritud hacia nadie, debería ser una realidad sabida por todos, pero parece ser que universidades, docentes y alumnos quieren crear una densa niebla que sirva para engañarse sobre el tiempo perdido, mientras que lo pierden, a la vez que llenan los bolsillos de algunos que no les importa esta realidad.
El Cine y el Teatro son dos mundos cercanos por el concepto; actor, arte, escena, pero distantes como la distancia que encontramos entre galaxias debido al medio, técnica y formación. Para demostrar de la forma más banal pero clara, la razón sobre los expuesto, pues hay criterios profesionales y profundos que lo demuestran sin ninguna moción a la duda, sobre lo poco que se sabe de la formación práctica y profesional del actor para cine y televisión en nuestras universidades, miraremos por encima los pensum ofertados por casi todos nuestros prestigiosos centros de formación superior y escuelas prestigiosas de nuestro país, que denotan que cojean de teatreros y lejanos a la realidad de lo que la industria demanda en todos los sentidos.
Así reparten el tiempo de nuestros futuros actores en la mayoría de las Universidades de prestigio de Bogotá y principales capitales del país (Les invito a que lo contrasten, Google no miente):
Primer año Segundo año
Actuación I Actuación III
Historia del teatro I Historia del teatro III
Teoría de actuación I Teoría de actuación III
Historia de cultura I Investigación I
Expresión corporal I Expresión corporal III
Expresión vocal I Expresión vocal III
Electiva I Electiva III
Actuación II Actuación IV
Historia del teatro II Historia del teatro IV
Teoría de actuación II Teoría de actuación IV
Historia de cultura II Semiología
Expresión corporal II Expresión corporal IV
Expresión vocal II Expresión vocal IV
Electiva II Laboratorio I
Tercer año Cuarto año
Actuación V Actuación VII
Dramaturgia I Prácticas artísticas
Gestión Investigación II
Dirección I Entretenimiento I
Expresión corporal V Montaje
Danza I Electiva VI
Expresión vocal V o Canto Preparación para vida profesional
Laboratorio II Entrenamiento II
Electiva IV Proyecto de grado
Actuación VI Preparación de grado
Dramaturgia II Eletiva VII
Escenotecnias
Dirección II
Expresión corporal VI
Danza II
Expresión vocal VI o Canto
Laboratorio III
Electiva V
¡Tendrán poca vergüenza!
Más del cuarenta y cinco por ciento de las asignaturas son teóricas y muchas de ellas puro relleno sobre lo dado en el año anterior. ¡Pero ni una sola asignatura con respecto a la actuación ante cámara! ¿Qué tipo de actores estamos sacando al mundo laboral en pleno siglo XXI donde el audiovisual gracias a Internet es el rey de la comunicación? Donde desgraciadamente la dramaturgia teatral es una anécdota laboral en nuestras carteleras profesionales de nuestros teatros centrales, quedando todo limitado a un esfuerzo sobre humano de los productores a conseguir giras casi circenses de una o dos funciones para poder mantener el concepto artístico del teatro vivo. ¿Quién vive decentemente del teatro en nuestro país?
Qué lejos están las universidades de la realidad y lo poco que les importa. Se dan cuenta queridos amigos y respetados alumnos que no hay mención al doblaje o al ADR asignatura obligada para un actor de cine y que sí tiene una gran salida laboral. Menos a las otras artes que rodean a la industria cinematográfica y televisiva.
No me queda más remedio que proclamar públicamente que la carrera de arte dramático que en líneas generales ofertan las universidades colombianas cojea de inefectiva para el desarrollo profesional de nuestros jóvenes.
INVITO A LOS RESPONSABLES DE ESTE TIPO DE ESTUDIOS QUE REFLEXIONEN SOBRE LO EXPUESTO Y BUSQUEN SOLUCIONES POR EL BIEN DE SUS ALUMNOS Y EGRESADOS
¿Después de lo dicho qué puedo decir de los futuros directores de cine? Sino tienen mis pobres futuros colegas la base con la que trabajar, hablo del actor. Se me deben quedar con cara de apocados al convertirse en técnicos teóricos de todo y profesionales de nada.. Pero a esta rama tan cacareada que venden algunas universidades a bombo y platillo en su oferta de programas de Cine y Televisión prefiero dedicarle un pensamiento protagonista en un próximo reportaje.
Saludos a todos
El Profe
Comentários